Las montañas aparte de respeto y cariño no necesitan nada más de lo que llevamos encima cuando realizamos una ruta en la motaña.
Seguramente más de una vez has visto basura mientras estas realizando tu ruta. Damos por hecho que si lo vemos, lo recogemos. La basura no va a volver sola. Aparte que dependiendo del material puede quedar bastante tiempo en el entorno, incluso llegando a contaminar esa zona.
- PAPEL: 6 MESES
- CERILLA: 7 MESES
- FILTRO CIG.: 2 AÑOS
- CHICLE: 5 AÑOS
- METALES: 10 AÑOS
- PLÁSTICO: 100 AÑOS
- VIDRIOS:400 AÑOS
- LATA DE REFRESCO: ILIMITADO
Tirar o abandonar desechos orgánicos en la montaña no es buena idea y genera un impacto ambiental.
La mayoría de los amantes de actividades al aire libre está consciente de que nuestro paso por la montaña y la naturaleza ha de generar el menor impacto posible: no dejar huella, no sólo respetando los senderos, así como la fauna y flora de lugar, sino también trayendo de vuelta a casa la basura que generamos, como las latas, plásticos y aluminio, pero incluso hasta la cinta para los dedos que usan, por ejemplo, los escaladores.
Cada uno de los deshechos orgánicos tiene un tiempo de descomposición diferente y, para que éstos puedan convertirse en abono, requieren de condiciones especiales de humedad, presión, temperatura, presencia biológica, óptimas para que ese residuo pueda ser reutilizado por la naturaleza (humus o abono).
Pero eso no es todo, aunque los deshechos orgánicos, como la cáscara del plátano o el corazón de una manzana, se descomponen más rápido que una lata, sí causan impacto en el medio ambiente. ¿Cómo?, cambiando el estado del suelo. Es decir, cada especie de plantas crece en un suelo determinado (por sus nutrientes y condiciones de humedad). Por ejemplo, las orquídeas nacen en suelos carentes de nutrientes; al arrojar desechos biodegradables a la tierra cambiamos tanto su PH como el nivel de nutrientes, impactando en el ritmo de crecimiento de dicha planta.
Asimismo, los restos de comida, cáscaras y huesos de fruta que abandonamos, tienen efectos contaminantes en el aire cuando se pudren o descomponen, ya que desprenden gases tipo invernadero, que evidentemente afectan a la fauna y flora del ecosistema.
Contaminación visual
Si cada una de las personas que visitan una zona de escalada, un sendero, un mirador o la cima de una montaña deja las cáscaras de naranja, plátano o papel, el sitio se convierte en un basurero. Sí, los deshechos terminarán desintegrándose, sin embargo, si cada vez somos más los que pasamos por el mismo lugar, el tiempo de descomposición será mayor que la cantidad de basura abandonada y el lugar será lo más parecido a un basurero.
Y peor aún con el papel de baño. Todos aquellos que hayan frecuentado alguna montaña habrán notado que los visitantes solemos elegir los mismos sitios para ir al baño. Y, ¿cómo es que nos damos cuenta de esto? Pues porque esos lugares están llenos de papeles de baño tirados por todos lados que sí, son biodegradables, sin embargo, su presencia hace del lugar un verdadero vertedero. El papel de baño ha de volver a casa y la mejor forma es llevar una bolsa de plástico para recogerlo. Asimismo, en la mayoría de los lugares, el entierro de las heces humanas es el método más efectivo para lograr su adecuada descomposición.
Fuente: Freeman.la